Caminar, escuchar, dejarte seducir por las estrellas. Dejar a un lado lo "importante" y todo aquello que el mundo te precipita a hacer parte de tu vida para poder "subsistir dignamente" y simplemente dedicarte a reír con infinidad de simplezas, de momentos y dosis de romance que a veces te hacen la vida empalagosa y dulce, pero al fin y al cabo: especial, no tanto por la otra persona (aunque claro debe ser alguien muy especial) sino por quien eres frente a ese tipo de situaciones.
Te desconoces, pero te encantas porque tu alma y tú sabes que la costumbre no es esa, que salir un poco de tu rutina y hacer feliz a alguien más te hace mejor. Hacer sonreír a otros nos hace mejores.
Sé que también has sonreído pensando en alguien, se también que quizás no todo resulta como esperas, que a veces la complicada forma de vivir que el mundo nos ha enseñado nos lleva a ser cuadriculados, incluso aburridos frente a ese tipo de situaciones que yo llamo "el cielo en la tierra"; pero ¿Por qué? ¿por qué se complican pudiendo tenerlo todo? ¿por qué no simplemente se miran fijamente, sonríen y se abrazan des-interesadamente, sin esperar nada a cambio, sin querer cambiar al otro, queriendo únicamente hacer feliz aquel que tienen frente a sus corazones?
Que la plata, que los amigos, que el futuro, que las metas, que los destinos y las ideas deben ser iguales, que si no se hace de esta forma entonces no funciona ¡carajo! con razón ya nadie quiere amar.
Lo mejor de ir por la vida es quizás ir bien acompañado, después de todo, tenemos un mundo maravilloso, lleno de cosas increíbles, de cosas simples pero mágicas que nos muestran con cada detalle el inmenso amor con el que Dios lo creó, justo para ti, para mí, el cuál merece ser compartido y explorado con alguien que esté dispuesto a descubrirlo de forma genuina junto a ti.
Pero jamás lo vamos a lograr si seguimos pensando sólo en nosotros, en nuestro bienestar y en nuestro ombligo, qué sentido tiene a caso vivir en un planeta de cientos de millones y millones de personas que sólo están dispuestos a ser felices de forma individualista? en fin.
Descubrir, hacerlo mientras acompañas a alguien, ¿no se lee muy bonito? ¿o es que acaso no se cansan de ser egoístas, de pensar sólo en ustedes y querer encontrar quien les de justo lo que ustedes y su antojo "necesitan"? por qué mejor no se vuelven un motivo de alegría para alguien más (mamá, papá, hermanos, novi@) qué se yo, tanta gente en este planeta que desea sentir alguien al lado, pero al lado en serio, no sólo en lo físico, al lado como un apoyo, como un motivo de alegría (no de peleas, caprichitos, falsas necesidades y etc) intente a ver qué pasa.
Alegría, ¿la conocen? es eso que en la sencillez de un abrazo se descubre, o que en la sonrisa de un niño pueden percibir. No, no es eso que sientes cuando te complacen luego de lograr un capricho, tampoco es eso que obtienes de forma egoísta, es eso que sientes cuando sabes que eres un buen motivo de felicidad para otro ¿lo eres? eres una razón por la cual alguien más sonríe, o eres de esos que sólo indisponen con su presencia al resto?
Yo decidí ofrecerle a mi felicidad un ingrediente extra: la felicidad del resto, y desde entonces, a mí la vida me sonríe.
